PASOS PARA LA TUSA
- MAR_STEPHANNY
- 22 dic 2019
- 6 Min. de lectura
¿Será cierto eso de que un clavo saca otro clavo?
Parece que uno de los procesos más difíciles por el que todos pasamos es la tortura bien llamada tusa. Buscamos diferentes maneras de hacerla más llevadera y que parezca menos dolorosa. Las mujeres tenemos reacciones muy diferentes a la hora de acabar con una relación y, generalmente, las dinámicas se asemejan.
1. EL LLANTO (no llores por se acabó; sonríe porque sucedió).
La primera emoción que sentimos se ve reflejada por el llanto desaforado que expresan nuestros ojos. Los recuerdos, los momentos, las conversaciones, los amigos en común y todo lo que conlleva despegarse de una persona hace más daño de lo que parece. Nos despegarnos de eso que en su momento nos brindó emociones tan especiales. Nos llena de una nostalgia incontrolable. El llanto un claro elemento de desahogo y ayudará de alguna manera a sanar lo que llevamos internamente. Tratar de tragar las lágrimas nunca será buena opción.
2. LOS CAMBIOS (se vienen cambios, mi cuerpo pide tinta, #ModoGym No pain, no gain).
Querer empezar con la lipotusa, hacer ejercicio para ponernos en excelente estado físico y así hacer que la otra persona se arrepienta de haber perdido lo que será el prospecto de modelo que todos buscan. Pero en este caso la emoción dura poco. Hay dos opciones simples: subir o bajar de peso. La tristeza hace que perdamos el apetito y las ganas de llorar logran descomponer el cuerpo de manera inmediata. Por otro lado, a muchos se les despierta el instinto glotón y la necesidad de estar comiendo dulces, cenas exquisitas, licor sin medida, también hace que el cuerpo reaccione pero de manera contraria y los kilitos de más se vean reflejados en la talla de pantalón. Además, la falta de sexo hace que se pierda el cardio que probablemente sea lo único que cuente como ejercicio en la vida de muchos. También podrán darse cambios como querer verse muy atlético, estrenar corte de cabello, tatuarse, entre las múltiples maneras de querer “cerrar el ciclo”.
3. FIESTA, TRAGO Y CITAS (¿qué hay para hacer?, ¿quién por Chapinero?).
El instinto salvaje que se despierta a la hora de terminar una relación es quizá el distractor que todos utilizamos. Querer salir, bailar, tomar, puede tener un sin fin de probabilidades. Entre las diferentes opciones está conocer a una nueva persona, olvidarte de todo y disfrutar de la noche; hacer lo que jamás harías y disfrutar de la "libertad". Pero no siempre es así, hay una segunda opción: terminar llorando, dedicando canciones y llamando a el sujeto llamado EX.
El tiempo pasará y no bastarán los días para entender que todos vuelven. Extrañar es uno de los sentimientos más normales al terminar una relación. Llegan esos sábados de fiesta y conocemos a alguien que fácilmente podemos besar y terminar pasándola muy bien, lo difícil es despertar el domingo y ver que nuevamente estás solo, ese momento de profunda soledad que te hace querer volver, querer buscar. En este sentido debes pensar que la tristeza pasará y que ya no hay que lamentarse y empezar a disfrutar. Ve a cine solo, lee, explora esas cosas que te permitirán crecer y entender que no debes depender de nadie para ser feliz, para sentirte bien.
4. STALKER (cuando se cierra una puerta, se abre una ventana; #SinMiedoANada)
Hablar con esa persona especial todos los días, se vuelve costumbre. A la hora de tener que enfrentarnos a la realidad de que ya no está y, peor aún, desconocer de cualquier acción de la otra persona, nos llenamos de una ansiedad poco controlable. Nos mentimos. Sí, siempre todos con la frase de esperar "Solo deseo que conozcas a alguien y seas feliz" es la mentira más grande con la que todos vamos bien. El proceso por saber qué hace la otra persona, si ya sale con alguien más, si la pasa bien, es lo que más daña nuestra cabeza. El mayor miedo es ver a ese gran amor con alguien más, ver que has sido superado. La ira incontrolable y la imaginación empiezan a crear una nueva historia, puede que ese nuevo amor ya existiera antes de ti. Sí señores, su paño de lágrimas, su es solo una amiga ahora ocupa tu lugar. Por otro lado, está la postura que se convierte en un arma más mortal. No saber nada del otro. No siempre tienes que publicar todo, hay personas, lugares y momentos que deben ser llevados con la prudencia y la madurez.
5. SEGUNDA OPORTUNIDAD (nos merecemos más momentos, más tiempos, #Namaste)
En la mayoría de los casos alguna de las partes quiere volver, intentarlo nuevamente y es la peor decisión. No existe una segunda temporada, cuando la relación termina la peor decisión es volver porque es como querer reparar un vaso que ya se quebró. Intentar juntar los pedazos de algo que absurdamente ya no encanjará de nuevo. Dolera alejarse, pero la mejor decisión sera poner punto final. Si la relación acabó, ahí debe quedarse. No te desesperes, la soledad acabará o tarde que temprano la empezarás a apreciar.
6.CULPABLE (no eres tú, soy yo; te mereces a alguien mejor)
Siempre habrá detalles que falten en la historia, siempre el otro se culpará o te culpará, pero en la historia alguno de los dos será el villano. En cada historia habrá partes que se cuentan a conveniencia propia. Lo mejor para esta situación será ahorrarse las explicaciones. Nadie querrá entender la historia del villano, pero no te esfuerces porque los demás sepan la otra versión, cada persona decide en qué creer y tú no debes dar explicaciones de más. Es tu vida. Tampoco culpes al otro, no olvides que amaste y lo que pasó ya caducó y no tiene reparo. Si te alejaste por alguien más, estuvo bien, no hiciste daño, pero si por el contrario dañaste con los más profundos “cachos” déjalo ahí. Si amas a alguien no le haces daño, no lo torturas, no te vuelves un egoísta por querer tener ese ser seguro. Hay muchas razones que te llenarán de culpa, pero a lo hecho pecho y ya está. De esos errores aprenderás.
7. EL CLAVO (pedí todos mis contactos del celular, inbox y los agrego, #VaquitasAMiCorral)
Los días irán pasando, y bueno, para los seres humanos el antídoto más potente será olvidar o, mejor aún, suplantar a ese gran amor. Para esta nueva oportunidad quien llegue a tu vida será recibido con mayor precaución y mucha más cautela. Quizás se vuelvan recatados y no permitan que se conozca a ese nuevo amor; mientras que para otros es la voz más fuerte de decir "YA TE OLVIDÉ", cuando de verdad duele. Subirán y publicarán cosas con ese clavo y claro, no está mal, pero lo correcto es que de verdad estén felices. Tranquilos, si frecuenta los mismos lugares, hacen los mismos planes o, incluso, se dedican las mismas canciones que con su pareja anterior, pierde cuidado (positivo para ciclo cerrado).
8. NO ENCONTRAR A ALGUIEN MEJOR (me bajo la luna yo solita, mejor sola que mal acompañada)
Uno de los miedos más grandes al terminar una relación es no poder encontrar a alguien mejor. Alguien que ame tus caprichos y se enamore de esos malos días. Alguien que nuevamente te ame con la misma intensidad pero ALTO, llegarán mejores y de eso solo te encargas TÚ. Date la oportunidad de conocer a quien te merezca y no te conformes con lo poco que alguien más puede brindarte. La muestra más fiel para con nosotros es amar y el primer amor que debes encontrar es ese amor propio, ese amor intenso que se encargue de respetarte y admirarte. Como lo dijeron en alguna vieja película en la que no olvido esta frase, “Estamos acostumbrados a recibir el amor que creemos merecer”.
9. LA TUSA DE LA TUSA (este frío está como para Netflix. ¿Alguien con HBO?).
Terminas un ciclo y la vida misma se encarga de curarte el alma y remendar con una nueva persona, alguien que nuevamente te hace creer en el amor y darte la oportunidad de reconstruir, pero cuidado: no siempre suele ser así. En la búsqueda de reconstruir, de sanar pueden llegar esos supuestos salvavidas que vendrán con todo el buen discurso de reparar aunque no sea del todo cierto. Muchos lobos van vestidos de oveja. A veces tocan a tu puerta cuando en realidad quieren soplar y soplar hasta derribar la casa entera. Luego, un dolor más agudo, más profundo. Una masacre al corazón en un tiempo limitado. Esta segunda oportunidad lastima porque, si bien se lidiaba con una tusa, la sensación no es placentera y por el contrario nuevamente te hace caer.
Siempre asociamos la tusa a la relación larga, esa en la que presentaste a tu familia y con quien hiciste visible el gran amor en redes y no siempre es así. Hay quienes experimentan ese dolor inexplicable con un amor que nadie conoce, ese que fue secreto, apasionado, discreto. Ese que nunca tuvo un te amo o una agarrada de mano pero con quien descubriste el amor o mas bien, ese mal capricho con quien de verdad experimentaste todo lo que jamás alguna pareja te había hecho sentir. Esa tusa de la tusa.
10. SUPERAR (#CerrandoCiclos)
Ni otra persona ni la venganza o los bloqueos te ayudarán a sanar. El tiempo será la mejor alternativa para curarte, para regenerar ese corazón que se destrozó. Tranquilo, nadie muere de amor y, aunque la recuperación se lenta, llegará ese momento de plena satisfacción. No trates de recordar las razones por las que se acabo, todo tiene un punto y aparte, y ese capitulo ya debe cerrarse. Agradece por lo que ya fue. Perdona, ya las heridas están cicatrizando. Sana porque nada mas te hará bien. El proceso terminó y solo tú serás quien descargue esa cruz.

Comments